El Presidente de la Xunta elige como nueva responsable de Medio Ambiente a una ex-imputada en uno de los mayores casos de corrupción de la historia reciente de Galicia
Ethel Vázquez sustituye a Agustín Hernández al frente de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras (CMATI), y estará al frente del área encargada de analizar las evaluaciones de impacto ambiental de cualquier proyecto minero que se lleve a cabo en territorio gallego. De 41 años, esta ingeniera de Caminos, Canales y Puertos anteriormente directora de la Axencia Galega de Infraestructuras fue llamada a declarar en 2011 como imputada en el marco de la 'Operación Campeón' en relación con la supuesta concesión irregular de una carretera en Pontevedra a una de las empresas inmersas en la trama, Proitec.
En su comparecencia judicial, Vázquez negó haber ordenado a un ingeniero de su departamento recomendar a la compañía que buscase otras dos firmas que concurriesen al concurso público de adjudicación y la causa fue archivada el pasado mes de diciembre al no poder demostrarse los hechos de manera fehaciente si bien se admitió la constatación de actuaciones "poco ortodoxas" por parte del departamento de Infraestructuras de la Xunta. Además de la hoy flamante Conselleira otros tres cargos de la Dirección Xeral fueron imputados por aquel entonces por supuesto tráfico e influencias en la tramitación irregular de contratos en favor de las empresas de la trama de Jorge Dorribo, columna vertebral del caso.
Tal como publicó el diario El País en su momento, "los investigadores grabaron una llamada de un funcionario de este departamento a Carlos Monjero, mano derecha de Dorribo y responsable de la firma de estudios técnicos Proitec, en la que el trabajador de la Xunta daba instrucciones al empresario para amañar la adjudicación del proyecto de mejora de la carretera que une Cerdedo y Campolameiro (PO-230)", pero cuando los agentes acudieron a la Xunta a pedir el expediente, fue la propia Ehel Vázquez la que les informó de que "no existía". No obstante "en el registro de la sede de Proitec, los agentes de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria se hicieron con la prueba de que el encargo a dedo del proyecto de la PO-230 a una empresa de la trama no eran imaginaciones suyas. Allí encontraron un documento con membrete de la Xunta en el que el entonces subdirector general de Estradas, el también imputado Luis Miguel Muñoz Bretos, con el visto bueno de su superior, Ethel Vázquez, solicitaba ofertas para la obra a Proitec y a otras dos firmas que, como le habían insinuado desde la Xunta a Monjero en el pinchazo telefónico, tenían relación también con la trama y, por tanto, presentarían propuestas lo suficientemente malas para ser descartadas".
Los investigadores, además, encontraron otro indicio de la relación de la entonces Directora Xeral de Infraestructuras y la trama de Dorribo, al localizar en las oficinas de Proitec "unas hojas con el nombre de Ethel Vázquez y una dirección de A Coruña que resultó ser el domicilio de su hermana", ante lo que Vázquez "no supo explicar este hallazgo ante la juez durante su declaración como imputada y negó cualquier relación de amistad con Carlos Monjero o su familia".
UNO DE LOS MAYORES ESCÁNDALOS DE CORRUPCIÓN DE LA HISTORIA RECIENTE DE GALICIA
Según se desprende del sumario, las empresas implicadas en la denominada 'Operación Campeón', habían montado presuntamente una trama que recibía subvenciones públicas del Instituto Galego de Promoción Económica (IGAPE), una agencia dependiente de la Consellería de Economía e Industria de la Xunta creada para fomentar la inversión empresarial.
Dentro del entramado la empresa Proitec, a través de su servicio de subvenciones a Pymes gallegas, ofrecía a otras empresas servicios de gestión empresarial cotidiana, tanto en tareas de contratación como en seguros sociales, afiliaciones o bajas, así como la preparación de estrategias financieras para la elaboración de planes de negocio, utilizando como gancho, habitualmente, las subvenciones del IGAPE.
AM/Red
21.6.2014
