La rotura de una balsa minera en Bolivia provoca un desastre ecológico en el río Pilcomayo

Tareas de medición y toma de muestras en el río Pilcomayo por parte de las autoridades bolivianas

La rotura de un dique de residuos de la empresa 'Santiago Apóstol' el pasado día 11 ha contaminado el cauce fluvial, que desemboca en Argentina y Paraguay, con 30.000 m³ de desechos tóxicos procedentes de la explotación metalífera de plomo, plata y zinc en la comunidad rural de Canutillos (Tacopampa), en el área de Potosí.

El desastre ambiental en el Pilcomayo ha causado que la Cancillería de Paraguay y el Diputado Nacional Argentino Alberto Asseff pidan informes sobre la situación, dado que el río también atraviesa el territorio de ambos países.

La Secretaría de Medio Ambiente y Madre Tierra del Departamento de Potosí reconoció que esta empresa minera no cuenta con licencia ambiental para la explotación de recursos minerales, mientras Cornelio Saavedra, Fiscal de la provincia, informó que ni la empresa ni la balsa cumplían con las normas ambientales y que la explotación ni siquiera contaba con geomembrana protectora, por lo que ha se ha procedido a iniciar una investigación de oficio al tratarse de un delito contra el medio ambiente.

Hasta el momento un total de 9 municipios y 26 comunidades han sido afectadas por el accidente, que ha disparado los niveles de turbidez del río y sobrepasado los niveles permitidos de sodio, hierro y manganeso en un 175, 166 y 200 por ciento respectivamente. El Gobierno de Bolivia ha anunciado, por su parte, que la falta de control y medidas de seguridad de la minera puede provocar su cierre definitivo una vez sean evaluados los daños.

AM/Red
18.7.2014